NOS ESCRIBEN...( x DOS )

Se Puede: Nos llegaron dos cartas casi simultáneas, con varios puntos en común.

Esta rara coincidencia, nos alienta a publicarlas juntas, y nos deben hacer pensar a todos.

Los lectores pueden opinar sobre ellas, clikeando al final de la nota en: ”comentarios”


¿Tendrán grandeza?


Estimado compañero director del Blog que tanto leo.

La otra noche fui al acto conjunto en Rosario, protagonizado por los compañeros Astori y Mujica.

Los escuché, pero fundamentalmente me metí en el clima de la gente.

Había frenteamplismo del mejor, de aquel que dejamos atrás hace mucho tiempo.

Fundamentalmente lo dejó atrás la tan mentada “orgánica”, porque la gente o sea nosotros, seguimos igual, con defectos y virtudes al ser simplemente humanos, pero llenos de sensibilidad, esa que se pierde, al igual que la visión política, cuando se está disputando parcelas muy pequeñas de poder, incluso algunas parecen serlo y ni siquiera alcanzan esa estatura.

El Pepe Mujica, se ha caracterizado por ser un político sencillo, sincero, espontáneo, humano...y a la vez divagante. Un estilo.

Le sirvió y nos sirvió a todos, para acumular votos en todas las clases sociales y en las diferentes concepciones ideológicas.

Todos tenían una explicación a su conducta. Los muy “sesudos” como aquellos que son más simples en sus análisis y principalmente en los que ven a la política de acuerdo a si el “hombre” les cae bien.

Si el Pepe antes de empezar, salivaba en el piso (nadie me lo contó, lo vi yo) la gente sonreía y no era una ordinariez, sino “el Pepe es así, es auténtico”. Sensacional, acumulamos votos.


Pero ahora es distinto. Para el Pepe y también para los demás dirigentes. Llegó, mejor dicho les llegó, la hora de ponerse los pantalones largos. Esos pantalones que supieron ponerse los Crottogini, Baliñas, Erro, Michelini, Arismendi, Cardozo, la negra Roballo y muchos otros, dejando como corolario al propio Gral. Seregni.

¡Qué hombres y mujeres! ¿Tenían defectos? Y claro que los tenían. ¿Había diferencias? Y por supuesto que sí, pero eran grandes en aquello que más necesita un país y su pueblo, eran hombres derechos, que además ponían al país por encima de sus orgullos, sus deseos personales y un sinfín de elementos que conforman a cualquier ser humano, y a la vez lo empequeñecen.

Ellos y otros que ni siquiera nombré, dejaban de lado las debilidades personales y levantaban la bandera del Frente Amplio porque sabían que era la única esperanza que el pueblo uruguayo tenía.

¿Los dirigentes de hoy tendrán esa grandeza?

Tengo la respuesta a flor de labios, en mi cabeza ronda permanentemente la respuesta negativa, pero quiero dar unos días más, alguna semana más, para que me digan “somos tan grandes como los que nos precedieron y aquí estamos”


¿Y cómo mido yo la grandeza? Muy simple.

Primero si el Pepe se deja de dar tantos barcinazos y diga, “compañeros, me debo a mi país, me debo a mi fuerza política, a la que aprendí a querer cuando me integré a ella y fundamentalmente porque es la única fuerza política que puede asegurarle al pueblo un bienestar mejor.

Por eso estoy decidido a ocupar la fórmula en carácter de vicepresidente, y con Danilo planificaremos la forma de trabajar”

Y se terminó, y ahí hay que empezar a buscar una plaza para levantar un monumento al Pepe.

Y eso se lo pido al Pepe porque sé que al compañero Astori no se lo puedo pedir. Danilo es distinto, no sé si mejor o peor, pero lo quiero de candidato a presidente para terminar con la payasesca y peligrosa oposición.

Con él ganamos, con el Pepe no. Con Danilo transitaremos tumultuosamente, él ubicándonos en el mundo real, frío y hasta inhóspito y el Pepe, junto con todo el Frente Amplio, tirando para los rasgos más humanos, menos técnicos, pero en definitiva más reales que los planteados por los tecnócratas.


“Juntos son dinamita”. Ese sería un título para un diario. Que por otra parte por nuestra propia mediocridad no tenemos.

Y todo esto con algunas paradojas.

Danilo es otro estilo que en lo personal no me gusta mucho, pero curiosamente es más frenteamplista que el Pepe. Éste es más cercano a mi forma de ser, pero menos frenteamplista. Incluso sus discursos, aunque parezcan unitarios, son exagerados, y pone en nivel de credibilidad a un hombre como Larrañaga, que no se merece ni un minuto de atención.


Sucede que el Pepe no fue nunca frenteamplista e incluso si tenía una tendencia, digamos que le corre sangre blanca por sus venas, claro, la rebeldía de los Aparicio Saravia, que no significa demasiada sensatez política.

¿Y los otros dirigentes, los otros sectores?

No los veo muy cercanos a tener actos de grandeza.

Ya lo están demostrando. Como algunos no se animan a decir que no quieren a Astori como candidato, hablan de CONSENSO haciendo creer que les importa esa palabrita tan afín al FA.

Pero quieren internas o mejor dicho, con calculadora en mano piensan que la fórmula que lleve a Mujica como candidato gana en el congreso, y también en una posible interna. Por eso apuestan al consenso en el Congreso, al querer imponer a Mujica.

Y así vamos, algo machucados, porque pase lo que pase, estos dirigentes se encargaron durante cuatro años de tirar tierra en el camino del Gobierno, con actitudes que fueron envenenando a gran parte de la militancia.

Y ahora cualquier militante orgánico, ignorante por supuesto, repite que quiere un Frigorífico que oficio de testigo. Opina sobre la energía. Opina sobre economía, que no sabe por qué tiene que criticarla, pero como su líder o los economistas de izquierda, o los ahora Asambleas Populares se pasaron denostando todo, ellos también critican.


En fin, el panorama es tétrico. No soy optimista aunque me esfuerce en decir o querer lo contrario. Y pienso que lamentablemente estamos en las manos de la decisión y la demostración de grandeza de un hombre. Ese es José Pepe Mujica.


Si él quiere pasar a integrar la galería de los grandes hombres y mujeres que tuvo nuestra fuerza política dirá que será sí o si, VICEPRESIDENTE, si continúa con un paso p´alante otro p´atrás y algunos para el costado izquierdo y otros para el derecho, estamos fritos.


Pedro, de Juan Lacaze (y perdón por la lata)

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Estimado director del blog, le agradezco la publicación de estas líneas.


ESPERANDO...



Mucho nos tememos, que en las reuniones de cúpulas, o de dirigentes o de sectores del FA, no se esté hablando ni por cerca de diferentes fórmulas.

Existe una sola desde hace tiempo, por lo tanto no se trata de problemas ideológicos, de diferentes visiones, etc. Acá hay un reparto puro y duro del poder.

Con muy buena onda se puede pensar que se acumula, para tener mejor forma de llevar adelante el perfil de cada sector. Aunque la práctica política de varias décadas, ha llevado a un desdibujamiento de esos perfiles.

¿El PS, la VA y NE, por ejemplo, tienen grandes diferencias ideológicas?


El presidente debe andar bastante enojado.

Él quería una fórmula para el FA, acordada y apoyada en el congreso, y que luego todos nos pusiéramos a trabajar para ganar en primera vuelta. Y por supuesto sin internas, que devengarían en caníbales.

No es necesario ser muy inteligente, basta con un poco de sentido común, para establecer que, de ese y de ningún otro modo se pueden asegurar los cambios realizados y los que aún faltan por concretarse.

Los dirigentes actuales del FA, se encuentran en un momento histórico, que parece no advierten muchos.

Ellos y sólo ellos, no las “bases”, los comités, las coordinadoras, el grupo de los 41, la mesa política, ...nada. De los dirigentes actuales del FA depende, que el Uruguay continúe con los cambios orientados por el FA, o que el FA desaparezca y con él la esperanza de la gente por varias décadas.


¿Nuestros dirigentes, se han puesto a pensar en el futuro del FA y de la izquierda en el Uruguay si se llegan a perder estas elecciones?


Es que estamos tentados a preguntarnos si realmente se prioriza en el país, en su gente o incluso en el mismo FA.

Al final debemos concluir, que el conductor natural de este proceso debe andar chisporroteando.

¿La reelección le pasará por encima al FA? o ¿Es que el FA no puede con sí mismo y con la realidad?


En el último congreso se resolvió que en 60 días las bases iban a nombrar un vicepresidente para el FA...y no pudieron. Si, es así. Quisieron pero no pudieron.

Y terminaron pidiéndole a los sectores que lo decidieran ellos, en un impresionante streeptease de incapacidad política. Los sectores, que tienen otros problemas ni siquiera lo han considerado aún.


En la discusión actual de “candidaturas”, sólo se oyen murmullos, y las caras cada vez más largas...

Este país, su gente, la izquierda uruguaya, que viene bregando por los cambios desde mucho antes del 71, se merece a estos dirigentes?


Si alguien importante en este país, responde que NO, tenemos reelección.


¿Y en ese caso, qué harán nuestros dirigentes? ¿Podrán acomodar el cuerpo y alegremente se dedicarán a confeccionar las listas? ¿Habrá autocríticas? ¿Cuántos tendrán la hidalguía de decir : “No pude resolver lo más trascendente que tuve en mis manos y entonces me marcho para casa”?


Susana de la Comercial....C.I. 2:345.....

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